Chile continúa fortaleciendo su compromiso con la agricultura sostenible, marcando un nuevo hito en la colaboración entre el Estado y el sector privado. Con el propósito de acelerar la transición hacia una producción baja en carbono y más eficiente, el país avanza hacia la carbono-neutralidad al 2050 mediante un acuerdo público-privado que promueve el desarrollo tecnológico, la innovación y el uso responsable de los recursos naturales.
Acuerdo nacional por la agricultura sostenible
Los ministerios de Economía, Agricultura, Energía y Medio Ambiente, junto a representantes del sector agroindustrial, firmaron el Acuerdo para la Descarbonización de la Producción Agrícola. Esta iniciativa busca fortalecer la agricultura sostenible mediante la cooperación público-privada, impulsando el desarrollo, validación y escalamiento de nuevas tecnologías con enfoque ecológico.
El acuerdo fue liderado por la División de Desarrollo Productivo Sostenible del Ministerio de Economía, y establece un marco de colaboración que promueve condiciones habilitantes y regulaciones acordes a la Ley Marco de Cambio Climático.
Colaboración público-privada para la sostenibilidad del campo chileno
La ceremonia se realizó en dependencias del Ministerio de Economía, con la presencia del ministro Álvaro García, la ministra de Agricultura Aurora Williams, el ministro de Energía Diego Pardow, la ministra de Medio Ambiente Maisa Rojas, y representantes del sector agroexportador.
También participaron líderes empresariales y asociaciones agrícolas comprometidas con el desarrollo de una agricultura sostenible, orientada a reducir emisiones y aumentar la eficiencia energética en los procesos de producción y distribución.
El acuerdo busca abordar desafíos como la electrificación de maquinaria agrícola, la gestión de emisiones en la cadena de valor y la creación de incentivos regulatorios para proyectos de innovación sostenible.
Compromiso ministerial con la sostenibilidad
Tras la firma, el ministro Álvaro García destacó que «este acuerdo refleja con claridad el camino que Chile debe seguir para crecer, que es aprovechar nuestras ventajas comparativas, como la minería, y transformarlas en una oportunidad para el desarrollo tecnológico y la innovación. Estamos impulsando una minería más sostenible y competitiva, que consolida el liderazgo internacional de Chile de la mano de una economía verde».
Aunque la cita original hace referencia al sector minero, el mismo principio se aplica a la agricultura sostenible, donde la innovación y la eficiencia energética son pilares del crecimiento verde.
Por su parte, el ministro de Energía, Diego Pardow, señaló que «este acuerdo es muy relevante en el contexto del segundo tiempo de la transición energética. Tanto en el largo plazo, con el recambio tecnológico, como en el corto plazo, en aquellas áreas donde buscamos sustituir hidrógeno gris y amoníaco gris, la minería será un aliado clave».
Del mismo modo, la agricultura sostenible se posiciona como una aliada estratégica en la transición energética, gracias al uso de biocombustibles, energías limpias y prácticas regenerativas que reducen la huella ambiental del sector.
La ministra de Medio Ambiente, Maisa Rojas, subrayó que “»ste acuerdo público-privado es una importante señal de cómo avanzar hacia la descarbonización de actividades económicas relevantes. A través de esta articulación, se espera identificar y viabilizar tecnologías que reduzcan el consumo de combustibles fósiles».
Innovación, energías limpias y futuro agrícola
El presidente ejecutivo del Consejo Minero, Joaquín Villarino, destacó que «la minería chilena tiene ventajas comparativas en su huella de carbono, dada la abundancia de fuentes energéticas renovables en el país. El desafío está en materializar esas ventajas a través de innovaciones tecnológicas y regulatorias».
De igual manera, el sector agrícola puede aprovechar dichas ventajas competitivas para fortalecer la agricultura sostenible. El uso de energías renovables en riego, procesamiento y transporte agrícola está permitiendo reducir significativamente las emisiones, contribuyendo al cumplimiento de las metas climáticas nacionales.
De acuerdo con datos de Cochilco, el 73,5% del consumo eléctrico en sectores productivos provino de fuentes limpias en 2024, cifra que podría superar el 78% en 2026. Estas cifras evidencian el avance transversal hacia una economía baja en carbono, donde la agricultura sostenible tiene un papel protagónico.
Acciones clave del acuerdo
Entre las principales medidas impulsadas por este acuerdo destacan:
- Desarrollar tecnologías para reducir emisiones en los distintos procesos productivos.
- Diseñar una hoja de ruta regulatoria que facilite la integración de la innovación en el campo.
- Fortalecer la conexión entre la estrategia climática nacional y la competitividad agroexportadora.
Estas acciones consolidan el liderazgo de Chile como referente global en agricultura sostenible, reforzando su posición como un país comprometido con la sostenibilidad ambiental, el desarrollo rural y la seguridad alimentaria.